El Castillo de Orpesa/Oropesa del Mar fue inicialmente construido por los musulmanes que abandonaron Orpesa la Vella por motivos estratégicos y de seguridad. Basta que te sitúes en él para comprobar el absoluto dominio visual que se tiene del horizonte mires donde mires. Posteriormente, y dada su importancia castrense, fue conquistado por personajes históricos como El Cid (1090) o el Rey Jaime I (1233).

Durante la Edad Media el castillo perteneció a la orden de los Hospitalarios hasta que fue conquistado por el rey Jaime I. De entre las familias que gobernaron la  villa posteriormente, cabe destacar a Jofre de Thous quien fortificó el castillo y las murallas.
En  su origen la planta de este castillo era poligonal regular, con seis torres abiertas en abanico, y una potente torre mayor de planta trapezoidal. Dicha estructura le confería una magnífica posición frente al invasor, del que eran avisados a través del sistema de vigilancia de las torres de la costa.
El asedio del mariscal Suchet en el s. XIX, propició la destrucción de la fortaleza.

Hoy en día, el Castillo de Orpesa/Oropesa del Mar constituye una referencia histórica, plagada de entresijos políticos y diplomáticos tan propios de la Edad Media. Pasearte por el Castillo resucita ese sentimiento de grandeza que tienen los hombres al pensar que todo lo que ven es suyo.